¿Qué puede haber de malo detrás de una asociación de ornitología?. En muchas partes del mundo los amantes de las aves tienen fama de ser casi tan aburridos como aquellos que pasan el día observando el ir y venir de los trenes, los cuales ostentan el primer puesto en este dudoso ranking.
En principio no debería de haber nada malo, pero cuando se utiliza la piel de cordero para esconder la de lobo, es señal de que existen otros intereses ocultos y muy ajenos al amor por los seres alados y picudos.
En Baleares existe un problema grave, más bien podemos decir que existen bastantes problemas muy graves, y algunos han aprovechado para copiar las tácticas callejeras que otros dejaron atrás hace muchos años, con el fin de justificar una supuesta resolución favorable de los mismos.
Que islas como Mallorca deben retomar el camino hacia la consecución de un turismo sostenible que no afecte al privilegiado entorno natural en el que se encuentran, es algo más que obvio. Que los medios elegidos sean amedrentar y acosar a los turistas que llegan de visita, es una filosofía propia de personas con un encefalograma cuasi plano.
La pregunta es: ¿Y cómo es posible plantear una convocatoria de protesta para recibir el próximo Domingo, día 8 de Abril, al mayor crucero que está actualmente surcando los mares?, el cual tiene prevista su llegada a Mallorca en esa fecha. La respuesta es bastante más sencilla de lo que pueda parecer, ya que nuestros amigos de la asociación de ornitología y defensa de la naturaleza de Mallorca (GOB), se han aliado con antituristas y otros grupos bajo los siguientes términos.
Malas influencias
Lo primero que se necesita para convencer a la gente de que recibir a los turistas con protestas y movilizaciones es la mejor manera de resolver un problema, es poner los peores ejemplos posibles.
Los organizadores de este aquelarre ponen como espejo las protestas de los venecianos ante la masiva llegada de cruceros a la ciudad, lo cual les dió una repercusión internacional, principalmente por la mala educación, ya que el problema pervive a día de hoy.
Por supuesto, hay que obviar las medidas tomadas por el gobierno local y estatal en Dubrovnik, una diminuta población que estaba muriéndose, literalmente, de éxito.
La masiva llegada de cruceros puso al límite los recursos y capacidad de la ciudad, por lo que no quedó otra que ponerse manos a la obra y diseñar un plan para seguir manteniendo el flujo de visitantes, pero bajo un control más estricto.
En ningún caso se atacó a los turistas extranjeros, los cuales no tienen culpa absolutamente de nada, sino más bien al descontrol de las navieras, con las que se sentaron a negociar para evitar los colapsos que se estaban produciendo a diario durante el Verano.
Tampoco les viene bien nombrar el caso islandés, un pequeño país que ha florecido gracias a las visitas de turistas, y que cuenta con una de las mayores riquezas medioambientales del planeta Tierra.
Las autoridades de Islandia trabajan muy duramente para configurar un sistema que permita la llegada de visitantes de una manera razonable y escalonada, y que al mismo tiempo consienta una convivencia plena entre los más que importantes intereses ecológicos, con los no menos despreciables económicos.
Efectivamente, nunca verán a un islandés gritándole a un turista por haber viajado hasta la isla.
Más recientemente en Irlanda, un pequeño país poco acostumbrado a albergar grandes cantidades de extranjeros, se han visto en la necesidad de regular y proteger las visitas a las islas del Suroeste, las cuales incrementaron increíblemente su fama gracias a grandes producciones cinematográficas que las eligieron como ubicación de la trama.
Evidentemente, ni a los visitantes de las poblaciones costeras limítrofes se les ha pasado por la cabeza atacar al turismo, sino hacer lo que corresponde: trabajar y diseñar un plan que permita defender los intereses de todos los sectores implicados.
El sucio capitalismo
La segunda premisa necesaria que más vende es intentar relacionar el problema con oscuros intereses económicos de lobbies capitalistas y explotadores.
Para ello, lo primero que han hecho nuestros amigos de GOB es ridiculizar las dimensiones y servicios del barco objeto del próximo escrache, el «Symphony of the Seas», haciéndolo parecer el paraíso de detestables millonarios que puro en mano se ríen de los obreros que pican las aceras de las calles.
Estos asquerosos capitalistas llegan a las islas con la intención de «colonizar» las mismas, término utilizado por los organizadores y que también suele funcionar muy bien en determinados ambientillos.
Parece que no se enteran de que a un matrimonio de Vancouver celebrando sus bodas de oro a bordo de este barco, le importa tres pepinos la colonización de unas islas en las que van a pasar escasas 24 horas.
Como no, es importante destacar las pésimas condiciones laborales de las tripulaciones de estos navíos, los cuales se abanderan normalmente en algunos paraísos fiscales para beneficiarse de sus ventajas a la hora de cumplir con el fisco.
Ahora, si debemos juzgar a los turistas que suben a estos barcos por esta razón, también deberíamos dejar de viajar a Cuba, por ejemplo, donde licenciados en medicina y profesionales altamente cualificados de muchas otras ramas, ponen cubatas a los visitantes extranjeros, o les cantan canciones en la playa por un dólar.
Franco
La figura del dictador, fallecido hace más de 40 años aunque algunos se empeñen en resucitarlo todos los días, es el nexo que lo une todo.
¿Y cómo metemos a Franco en esta ecuación para que cause el impacto deseado?. Pues muy fácil, se asegura que los hoteleros que llevan trabajando toda la vida en las Islas, generando puestos de trabajo, son los «herederos del franquismo», así, sin más, con dos narices.
Ante esto, ¿quién puede defender a estos seres abominables que en la mayoría de los casos o no habían nacido, o apenas tenían pocos años de edad durante la dictadura? Pues los fachas, que son todos aquellos que no comulgan con este tipo de ideas.
Si no estás de acuerdo con este tipo de movilizaciones, eres un facha. Si crees que el problema corresponde arreglarlo en la Consejería de Turismo y no en la calle, eres un facha. Si piensas que manteniendo una postura hostil frente a los turistas lo único que haces es manchar la excelente reputación de una Comunidad, eres un facha. Si escribes sobre fachas, eres un facha…
Lamentablemente, existen multitud de puertos encantados en recibir a este barco y muchos otros similares, tanto en España como fuera de ella. A muchos les cuesta entender que en determinados lugares, como las Islas Baleares, los sectores que puedan parecer más distanciados, mantienen vínculos comunes.
En aviación tenemos un ejemplo muy bueno que define perfectamente esta situación, que se llama «Overshoot». Esto ocurre cuando, por ejemplo, intentas hacer una corrección en la dirección que llevas, y la realizas con tanto afán que te pasas de la raya y te pones automáticamente en un problema bastante más grave al que tenías.
Y más pronto que tarde, tal y como está pasando ya en otras latitudes, veremos como algunos empiezan a rasgarse las vestiduras cuando se den cuenta que tenían la gallina de los huevos de oro y la mataron porque no sabían cómo gestionarla.