Hablamos de una tradición que tiene origen militar y que se remonta en el tiempo muchos siglos atrás.
Un buen número de aerolíneas la han respetado, y obviamente es más evidente en aquellas banderas que no son simétricas y que están ubicadas a estribor, es decir, en el lado derecho de la aeronave vista desde su parte trasera.
Todos hemos visto en el cine o en la televisión escenas de contiendas históricas, en las que las tropas de cada bando corrían en el campo de batalla una contra otra.
De entre todos los elementos presentes en el combate y por encima de cualquier soldado, incluso de los de mayor rango, se encontraban las banderas de los países enfrentados.
La tradición militar otorga a la bandera el papel principal y el más respetado, motivo por el cual dejarla caer al suelo es un acto de deshonor y de sumisión al enemigo.
Si el porteador de la misma era abatido durante la contienda, otro soldado tendría que hacerse cargo y recoger la bandera inmediatamente.
De esta manera, la bandera siempre seguiría su camino hacia delante, nunca hacia atrás o en retirada, y muchísimo menos tirada en el suelo.
Ese mismo respeto hacia la enseña nacional también existía en la marina, en la que cada navío enarbolaba en su parte trasera la bandera del país al que pertenecía.
Hoy en día incluso se sigue respetando la tradición y evitando que la bandera toque la cubierta del barco cuando es arriada.
La aviación tomó el mismo ejemplo y legalmente todas las aeronaves están obligadas a volar mostrando un número de registro y la bandera del país al que pertenecen, a pesar de que este último dato también se podría conocer sin ninguna dificultad gracias a las primeras letras de la matrícula.
Aunque hay algunas excepciones, la gran mayoría de compañías aéreas también colocan sus banderas en la parte trasera del fuselaje, tanto en la parte derecha como en la izquierda del mismo.
Como es lógico, se trata de banderas pintadas, pero esto no impide que cumplan exactamente las mismas normas y tradiciones que ostentan las que se encuentran izadas en un mástil.
Esto quiere decir que tienen que actuar cómo si estuviesen recibiendo el efecto del aire con el movimiento hacia delante.
En la bandera situada a babor, esto es, a la izquierda del avión visto desde su parte trasera, esta condición se cumple, pero no pasa lo mismo con la que está a estribor.
Las banderas no simétricas ubicadas en el costado derecho de cualquier aeronave (vista desde atrás), parece que en vez de avanzar hacia delante lo que están haciendo es retroceder.
Este es el motivo por el cual se colocan al revés: para dar la impresión de que están recibiendo el impacto del aire en movimiento hacia delante.
Por extensión, esta tradición también se puede observar en uniformes de diversos países, y también en vehículos terrestres.
Generalmente, la bandera ocupa el hombro derecho del soldado, y por el mismo motivo que acabamos de comentar, muchos ejércitos han considerando colocarlas al revés.
No se trata pues de un error tipográfico, ni mucho menos de un menosprecio a la bandera, sino todo lo contrario.
Colocando la bandera de estribor al revés, se da la impresión de que esta actúa ante el movimiento hacia delante de la aeronave.