Nos encontramos en la antesala de un Verano especialmente bochornoso, y no sólo en lo que se refiere a lo que puedan llegar a marcar los termómetros durante los meses estivales, sino más bien en cuanto al caos y descontrol que se avecina en muchos aeropuertos y compañías aéreas del Viejo Continente.
A pesar de que todavía no hemos llegado a las semanas en las que se registra un mayor número de operaciones, principalmente durante Julio y Agosto, en estos momentos la situación del sector aéreo en los países más relevantes del continente es muy preocupante.
La falta de personal en muchos aeródromos y los recortes de plantilla que se hicieron en la práctica totalidad de compañías aéreas, están dando como resultado un panorama desalentador que acabará agravando, una vez más, la situación turística nacional e internacional.
España
Mientras el grupo Iberia ha denunciado públicamente que desde el pasado mes de Marzo y hasta esta semana, más de 15.000 pasajeros habían perdido sus vuelos debido a las aglomeraciones y esperas en Barajas, el gobierno afirma que en ningún momento se han producido «colas o retrasos significativos».
Una afirmación realizada desde organismos oficiales que choca frontalmente con lo sucedido el pasado Lunes día 6 de Junio, cuando las redes sociales se llenaron de fotos y vídeos denunciando la situación de descontrol del aeródromo madrileño.
En el caso de Barajas llueve sobre mojado, ya que los problemas operativos derivados de la falta de personal se repiten de manera cíclica desde mucho antes de la pandemia, sin que hasta hoy se hayan llegado a tomar cartas en el asunto.
De todas formas, la capital española no es el único punto caliente para los viajeros. Desde el Reino Unido se continúan lanzando avisos alertando sobre situaciones puntuales de colapso en otros aeropuertos, como por ejemplo el de Mallorca.
Diversos sindicatos policiales están confirmando que al necesitarse mucho más tiempo para gestionar la entrada de visitantes ingleses, que desde la aprobación del Brexit precisan pasar por el control de pasaportes, las aglomeraciones se han convertido en el pan nuestro de cada día.
Italia
El país transalpino afrontó durante la pasada semana la primera convocatoria de huelga realizada por diversos sindicatos, entre los que se encuentran trabajadores de EasyJet y Crewlink.
Esta primera jornada de protesta provocó la cancelación de decenas de vuelos desde los principales aeropuertos de Italia, dejando un reguero de pasajeros en tierra y multitud de incidencias.
A la huelga convocada por empleados de diversas aerolíneas, hay que sumar la anunciado por los controladores aéreos de Milán, Turín, Génova, Verona, Cuneo y Parma.
La lowcost irlandesa Ryanair, una de las compañías más afectadas, se vio obligada a anunciar la cancelación de diversos vuelos con salida programada desde los aeródromos afectados.
En el caso de que sus reivindicaciones no sean atendidos, los convocantes aseguran que proseguirán con parones intermitentes durante todo el Verano.
Francia
Igual que en el caso de Italia, otra huelga de trabajadores del aeropuerto Paris Charles de Gaulle, ha provocado la cancelación de centenares de vuelos hace menos de 7 días.
Air France ha anunciado a sus pasajeros la cancelación de 85 operaciones programadas desde el principal aeródromo de la capital francesa, aunque prácticamente todas las compañías aéreas que operan desde el se han encontrado con la misma situación.
En estos momentos, se desconoce la duración de las protestas, que podrían continuar durante las próximas semanas.
Alemania
La aerolínea estatal Lufthansa ha cancelado 900 vuelos programados para el próximo mes de Julio, que partían desde los aeropuertos de Frankfurt y Múnich.
Por otro lado, GermanWings, subsidiaria de Lufthansa, también ha anunciado la cancelación de varios centenares de vuelos en todo el país.
Ambas compañías han indicado que con estas medidas buscan evitar la formación de un «cuello de botella» durante el Verano, asumiendo que no podrán atender el volumen de pasajeros que tenían previsto.
En los dos casos, una pésima planificación de la temporada estival, sumada a un anunciado aumento de las esperas en dos de los aeropuertos más saturados de Europa, han llevado a tener que anular miles de operaciones planificadas para el próximo mes.
Países Bajos
El aeropuerto de Schiphol está experimentando la crónica de una «muerte» anunciada.
KLM, aerolínea estatal holandesa, se ha visto obligada a cancelar durante todo un fin de semana la venta de billetes para todas sus operaciones desde Amsterdam, una medida que se espera pueda llegar a despejar el intenso tráfico desde Schiphol.
Siguiendo la misma línea que en los casos anteriores, la falta de personal y las malas condiciones laborales de los trabajadores en el aeródromo holandés, pueden llegar a arruinar una de las temporadas de mayor tráfico de toda su historia.
Irlanda
Hace 14 días, el aeropuerto internacional de Dublín se convirtió en un escenario de cancelaciones y retrasos nunca vistos hasta la fecha.
Con 1.000 empleados menos que a finales de 2019, Dublín pretende atender el aluvión de usuarios de este Verano con una plantilla que se queja de las condiciones de trabajo leoninas impuestas desde la dirección.
Finalmente, el resultado son cientos de cancelaciones de vuelos y acusaciones mutuas de irresponsabilidad entre el Ministro de Transportes de Irlanda y los directivos del aeródromo.
Reino Unido
La única forma de describir lo que está sucediendo en el Reino Unido, es comparándolo con una auténtica pesadilla para los viajeros.
No sólo se trata de las colas y esperas a las que son sometidos los turistas nacionales y extranjeros, sino también de la lluvia incesante de cancelaciones anunciadas por EasyJet, British Airways, o TUI, entre otras aerolíneas.
De momento, la situación ya ha forzado la dimisión de la directora del aeropuerto de Manchester, uno de los más afectados, y a estas alturas no es posible descartar más bajas en los próximos meses.
La salida de cientos de miles de trabajadores tras la aprobación del Brexit, ha dejado al sector aéreo inglés en pañales e incapaz de encontrar sustitutos para reemplazar la mano de obra perdida.
Las largas esperas no sólo afectan a los pasajeros, sino también a las operaciones de carga, en las que los camiones que se acercan hasta diversos aeropuertos del país para recoger mercancía, tienen que soportar retrasos de hasta 7 horas.
Qué puedes hacer
Si tienes previsto viajar durante los próximos meses, deberías tener contratado un seguro de viaje que pueda cubrir las situaciones que impliquen retrasos, o incluso la cancelación obligada de las vacaciones.
Intenta presentarte siempre en los aeropuertos con la antelación suficiente, asumiendo que es probable que se formen colas para acceder a los controles de seguridad y salas de embarque.
Deja un remanente económico al que puedas echar mano en caso de tener que permanecer más días de los esperados en destino, o para adquirir billetes de avión con el fin de regresar a tu punto de origen.
Por supuesto, deberías conocer tus derechos como pasajero y hacerlos valer en el caso de encontrarte con incidencias durante tu viaje.
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