La noticia sobre la nueva iniciativa de British Airways se acaba de filtrar a los medios de comunicación, al mismo tiempo que la aerolínea reconocía a través de su gabinete de prensa que efectivamente están trabajando para poder ofertar tests PCR a los pasajeros, antes de que estos embarquen en sus aviones.
«Estamos haciendo todo lo posible para conseguir un vuelo seguro y libre de preocupaciones para nuestros pasajeros. En estos momentos, nos encontramos negociando la posibilidad de ayudar a nuestros clientes con la realización de tests previos a su viaje, a través de una tercera empresa, en el caso de que el destino al que se dirigen requiera este tipo de pruebas. British Airways no va a declarar obligatorios estos tests para todos sus pasajeros».
La tercera empresa a la que hace alusión el comunicado emitido por British Airways es la farmacéutica Boots, que actualmente ya se encuentra colaborando con Emirates en la realización de tests médicos de este tipo.
De hecho, la aerolínea árabe se convirtió en la pionera a la hora de realizar tests PCR a sus pasajeros en determinados vuelos de repatriación, durante los primeros meses de la crisis sanitaria, para posteriormente pasar a requerirlos en buena parte de sus rutas internacionales.
La aerolínea inglesa confía en que gracias a esta medida se pueda aumentar el nivel de confianza del usuario del transporte aéreo, incrementando también con ello el bajo número actual de reservas, que a día de hoy sigue siendo muy preocupante.
Los empleados de la conocida farmacéutica Boots comenzarán la semana que viene un proceso de formación, cuyo fin es precisamente la implementación de un sistema que permita el poder realizar tests PCR a los pasajeros de British Airways.
La elección de Boots no es un hecho casual, ya que esta conocida empresa es propiedad de Walgreens, la segunda farmacéutica más importante de los Estados Unidos.
Esta alianza estratégica con British Airways podría propiciar una reciprocidad por parte del gobierno estadounidense, lo que llevaría a la realización de los tests PCR a ambos lados del Atlántico, un hecho que ayudaría a levantar los vetos actuales entre los dos países para los pasajeros que vuelen entre el Reino Unido y EEUU.
La recuperación inmediata de las rutas con los EEUU es fundamental para todas las compañías aéreas, pero principalmente para British Airways.
Tal y como hemos indicado en múltiples ocasiones desde Turama, la recuperación del tráfico en el sector aéreo no se va a producir de la noche a la mañana, ni tampoco va a llegar por iniciativa propia.
La desconfianza de los pasajeros continua en aumento, y para poder llegar a vencer las reticencias vigentes en la actualidad, las aerolíneas van a tener que reforzar la confianza de sus clientes a base de medidas como la que supuestamente adoptará British Airways durante las próximas semanas.
Una política atractiva para los casos de cancelaciones, como la que ofertan en la actualidad Qatar o Emirates, medidas de prevención a bordo de las aeronaves, como las adoptadas por Delta, e iniciativas originales como las anunciadas por Qantas, van a ser indispensables para volver a hacer atractiva la compra de billetes de avión.
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