La aerolínea norteamericana comenzará a realizar tests de Covid19 a todos sus empleados, como una parte de la batería de medidas aprobadas para evitar contagios a bordo de sus aviones.
Los más de 90.000 trabajadores de la compañía pasarán a partir del próximo día 15 de Junio por alguno de los hubs designados para llevar a cabo las pruebas, que en un principio serán los ubicados en Minneapolis, Atlanta, Detroit y Nueva York.
El máximo responsable de Delta Airlines, Ed Bastian, ha definido el plan de la aerolínea como una superposición de «capas de protección», las cuales actuando en conjunto garantizan la máxima seguridad a la hora de viajar en avión.
Bastian ha explicado que los tests están dirigidos a los trabajadores, pero finalmente los pasajeros también se benefician indirectamente de ellos, al saber que las tripulaciones con las que vuelan han superado los mismos con éxito.
Además, Delta ha declarado la obligatoriedad de hacer uso de mascarillas sanitarias dentro de las cabinas de sus aviones, en las que se mantendrá una distancia social de seguridad entre los pasajeros, como mínimo hasta el próximo mes de Septiembre.
La flota de Delta sólo ocupara el 50% de los asientos disponibles en Primera Clase y Business, y el 60% de los de clase Economy.
Delta Airlines ha sido la primera compañía aérea en el mundo en crear un departamento exclusivo, cuya única función va a ser el diseño y ejecución de los planes de limpieza y desinfección de cada avión.
De esta manera, cada aeronave será desinfectada después de cada vuelo, y no al finalizar la jornada diaria, tal y como han propuesto otras compañías aéreas.
A día de hoy, Delta sólo está operando con 46 aviones, de una flota compuesta por 844 aparatos.
Durante el próximo mes de Julio se espera aumentar esta cifra hasta las 74 aeronaves, lo que significaría el poder operar menos del 40% de las rutas que volaba en 2019.
Aún así, nos alegra enormemente ver a ciertas aerolíneas que anteponen la seguridad de sus pasajeros a cualquier otro factor, tomando todas las medidas que están en su mano para recuperar la confianza de los usuarios del transporte aéreo.
Se prevé que la alemana Lufthansa ofrezca a sus clientes la posibilidad de realizar tests PCR previos al embarque, pero de momento se desconoce en qué aeropuertos y para qué tipo de vuelos estarán disponibles.
Estas pruebas serán abonadas directamente por el pasajero a la empresa sanitaria encargada de realizar las mismas, y los resultados se podrán conocer en un plazo aproximado de 4 horas.
A día de hoy, el único aeródromo en el que es posible hacerse un test de Covid19 es el Aeropuerto Internacional de Viena, en Austria, previo abono de un total de 190 euros.
El aeropuerto de Luxemburgo también los está realizando de manera gratuita, pero tan solo se trata de una experiencia piloto que finalizará en breve, y que muy probablemente no se siga desarrollando en el futuro.
Cada vez son más los pasajeros que desean conocer con antelación las medidas tomadas por las compañías aéreas a bordo de sus aviones para minimizar los riesgos de contagio, y por primera vez en mucho tiempo la tarifa de los billetes no es el factor clave para decidir con qué aerolínea se desea volar.
De cara a volver a recuperar la confianza de los pasajeros y el volumen de tráfico aéreo que se registraba antes de la crisis, va a ser necesario que todo el sector aéreo se ponga manos a la obra, ya que es enormemente perjudicial el hecho de que unas compañías adopten ciertas normas de prevención, otras digan que esas mismas normas no son necesarias, y unas pocas decidan actuar como si no pasase absolutamente nada.
La crisis posterior a los ataques del 11S cambió de manera definitiva la forma en la que se viajaba en avión, gracias a que hubo un consenso en cuanto a las leyes y medidas a aplicar para garantizar la seguridad aérea.
Todos los aeropuertos del mundo y todas las compañías aéreas aceptaron e implementaron las mismas medidas, algo que no está sucediendo en estos momentos.
Si se quiere recuperar el status quo del sector en un futuro, va a ser necesario el mismo consenso por parte de todas las partes implicadas.