El tiktoker neoyorquino que publicó el vídeo, recibió varias llamadas de los abogados de la compañía aérea estadounidense.
Las autoridades que regulan el sector aéreo en los EEUU han condenado este tipo de publicaciones, recordando que no respetar las normas de seguridad establecidas por la FAA es un delito grave que puede acarrear penas de prisión.
Parece que Marcus Monroe ha conseguido el objetivo que se había propuesto, que no era otro que llamar la atención y conseguir un buen número de seguidores.
Sin embargo, este tiktoker se ha enfrentado durante los últimos días a una situación especialmente seria, después de subir un vídeo a las redes sociales en el que supuestamente freía un filete dentro del inodoro ubicado en el baño de un avión de Delta Airlines.
A pesar de que, lamentablemente, un buen número de internautas le rieron la gracia, el vídeo acabó cayendo en manos de la Asesoría Jurídica de Delta Airlines, que procedió de inmediato a identificar al pasajero que lo protagonizaba.
Monroe lo titulaba de esta manera: «Ya no ofrecen comidas calientes en los aviones, así que…he encontrado la solución».
Posteriormente, se podía ver cómo introducía lo que parecía ser una especie de quemador, o pequeño infiernillo, dentro del inodoro, encendiéndolo con un mechero.
Mientras supuestamente el fuego se mantenía encendido, colocaba sobre el mismo una tapa de aspecto metálico, para terminar sacando un filete que incluso llegaba a sazonar.
Una vez cocinado, depositaba el filete en un plato y lo llevaba hasta su asiento dentro de la cabina, donde acababa comiéndolo.
Obviamente, el hecho de encender un fuego dentro del lavabo de un avión que se encuentra en pleno vuelo, es una violación grave de las directrices publicadas por la FAA al respecto, razón por la cual los abogados de Delta Airlines contactaron en varias ocasiones con Marcus Monroe.
El vídeo en cuestión se hizo viral en las redes la semana pasada, e incluso fue muy duramente criticado por otras aerolíneas de la competencia, como la lowcost Southwest, que aprovechaba para amenazar a cualquier pasajero que intentase hacer lo mismo a bordo de sus aviones.
Ante la posibilidad de enfrentarse a una reclamación judicial interpuesta por Delta Airlines, Monroe acabó aclarando que sólo se trataba de una broma, y que todo estaba convenientemente preparado.
De hecho, Monroe también había subido anteriormente otro vídeo en el que cortaba el cabello de una pasajera sentada delante suya en un avión, el cual colgaba hacia atrás y no le permitía ver la pantalla de televisión.
Ante el revuelo creado, Monroe también se vio obligado a reconocer que se trataba de un montaje, y la chica en cuestión llevaba una peluca y formaba parte de la trama.
En esta ocasión, y dado que se estaba dando a entender que se habían vulnerado las medidas básicas de seguridad a bordo de un avión, se consideró que las explicaciones facilitadas por Monroe no eran suficientes, por lo que se le exigió la retirada inmediata del vídeo y la pertinente explicación a sus seguidores.
Algunos especulaban con que el quemador sólo contenía una pequeña vela, con el fin de que se pudiese ver el reflejo de la llama, pero esto habría vulnerado igualmente las directrices de la FAA, por lo que finalmente se aclaró que se trataba de una luz manejada por control remoto, que imitaba el tintineo de una llama.
Según Monroe, llevaba consigo la luz y dos filetes, uno de lo cuales ya había sido precocinado, y lo que hizo fue simular que freía el crudo, para posteriormente cambiarlo por el segundo, que era el que finalmente sacaba del baño y trasladaba a su asiento para comer.
Esta explicación ha dado lugar a numerosas discusiones en las redes sociales, ya que muchos internautas se preguntan cómo es posible pasar dentro del equipaje de mano dos filetes de un tamaño considerable.
Por otro lado, parece evidente que si el filete se hubiese hecho realmente dentro del retrete, los detectores de humo habrían dado la señal de alarma.
En todo caso, parece que Monroe se las ingenió para pasar la seguridad del aeropuerto con dos filetes encima, el quemador, y la supuesta luz manejada por control remoto.
Por su parte, Delta Airlines publicaba el siguiente comentario:
«Nada es más importante para nosotros que la seguridad de nuestros pasajeros y empleados. Nuestro equipo ha investigado la situación y contactado con el cliente. Afortunadamente, el vídeo es un montaje y esta persona ha procedido a su borrado».
«Aparentar el incumplimiento de las normas de seguridad a bordo de una aeronave, no es ningún chiste para nosotros».
La seriedad con la que ha llevado este asunto Delta Airlines es entendible, dada la gravísima situación por la que atraviesa el sector aéreo.
Las aerolíneas ya no deben velar únicamente por la integridad física de sus pasajeros, sino que además están obligadas a garantizar su salud a bordo de los aviones, por lo que vídeos de este tipo dañan de manera muy grave la imagen del sector y pueden llegar a poner en peligro la pronta recuperación del mismo.
Es también realmente preocupante hasta qué punto estos supuestos «humoristas», o influencers de las redes sociales, están dispuestos a llegar para conseguir que su contenido se viralice.
No hace mucho, era otra internauta la que pasaba su lengua por la tapa del inodoro de un avión, en un vídeo que corrió de un lado a otro del planeta.
Aunque desde medios estadounidenses se asume que Delta podría dejar pasar todo este asunto, tras el borrado del vídeo y las disculpas y explicaciones dadas por parte de su autor, otras fuentes aseguran que la FAA podría estar estudiando actuar de oficio, y varias compañías podrían vetar la presencia de Monroe dentro de sus aviones.