Su flota consta de 6 aviones del modelo Boeing 737-600.
En muchas ocasiones, los nombres de los aeropuertos desde los que vuela y en los que aterriza, aparecen marcados como «DESCONOCIDO».
Hay una aerolínea que nunca ha perdido una sola maleta, nunca ha dejado en tierra a un solo cliente, y nunca ha recibido una sola reclamación por parte de sus pasajeros.
Lamentablemente, es muy improbable que alguien que esté leyendo ahora mismo este artículo llegue a subirse en uno de sus aviones, al menos de manera voluntaria…
No tiene ningún nombre comercial, aunque en el sector se la conoce como «Janet«, que es el distintivo de llamada que utiliza para comunicarse con tierra.
Se trata de una compañía aérea que presta sus servicios de manera exclusiva para el Departamento de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, operando vuelos con el fin de trasladar a sus empleados a distintas bases militares ubicadas en el Oeste y zona central del país.
Si te decimos que dos de los destinos más habituales de Janet son la base militar del Lago Groom, y el campo de pruebas de Tonopah, probablemente no te suenen de nada, pero si utilizamos sus respectivos apodos es seguro que te vas a dar cuenta al instante de lo que estamos hablando.
Nos referimos a las conocidas como Area 51 y Area 52, respectivamente.
La primera se ha convertido en un lugar de culto para todos los conspiranoicos, debido al alto grado de secretismo que rodea esta base, víctima de todo tipo de teorías que poco tienen que ver con la realidad.
Lo que sí es cierto es que en ella se han probado y mantenido fuera del alcance de los curiosos, varios de los modelos de avión más avanzados del ejército de los EEUU, razón por la cual se cree que a día de hoy sigue cumpliendo esta misma función.
En teoría, Area 51 no existía de manera oficial hasta el año 2013, fecha en la que la CIA desclasificaba una serie de documentos que hacían referencia a la misma.
Mucho tiempo antes ya se habían probado sobre su espacio aéreo aparatos como el SR-71, o el F-117, y algunos medios mantienen que actualmente alberga otros prototipos que todavía tardarán en salir a la luz pública.
Janet opera desde cinco Estados del país: California, Nevada, Nuevo Méjico, Ohio y Utah, y mantiene una terminal privada en el aeropuerto de McCarran, en Las Vegas.
No te molestes en ir a visitarla si estás por allí, ya que su acceso está fuertemente restringido y reservado a miembros de las Fuerzas Aéreas.
Lo más curioso de Janet es que sus aviones carecen de adornos y de una librea identificativa, con el fin de que puedan pasar desapercibidos entre el resto de aeronaves.
Esta costumbre logra precisamente el efecto contrario, y sus aparatos suelen llamar la atención de todo el mundo cuando operan desde un aeropuerto comercial, precisamente por la austeridad de colores y la falta de un nombre comercial sobre el fuselaje.
Los aviones de Janet tan solo presentan una franja de color rojo a la altura de las ventanillas, y la correspondiente matrícula identificativa en la parte trasera de la aeronave, nada más.
Habitualmente, gracias a esta matrícula y a diversas aplicaciones que sirven para rastrear vuelos, es posible seguir las operaciones de Janet sobre suelo estadounidense.
Sin embargo, en muchas ocasiones los aeropuertos de salida y de destino desde los que opera, aparecen marcados como «DESCONOCIDO«, lo que ha avivado historias que podrían entrar perfectamente en el campo de la ciencia ficción.
Los autores de estas teorías disparatadas, sostienen que JANET es un acrónimo de «Just Another Non Existent Terminal» (Sólo Otra Terminal que No Existe), jugando con el secretismo que envuelve a esta curiosa aerolínea.
Lo cierto es que la mayoría de las fuentes consultadas afirman que JANET significa «Joint Air Network for Employee Transportation».
Hace unos años saltó a los medios de comunicación de medio mundo, tras anunciar que estaba reclutando personal de cabina y pilotos para sus aviones.
La empresa que realizaba este proceso avisaba a todos los candidatos potenciales de que se investigaría su entorno personal y familiar, así como su círculo de amistades y vida privada, lo que daba una idea del altísimo grado de discreción que se espera por parte de sus empleados.
Janet es la aerolínea que no quiere llamar la atención y que ostenta el título de compañía aérea «secreta», cuando en realidad es una de las más buscadas por los spotters y cuyos movimientos son seguidos a diario por miles de aficionados a la aviación y también al conspiracionismo.
Dentro de las cabinas de sus aviones nadie va a encontrar a seres de otros mundos, ni planos secretos correspondientes a armas futuristas de utlimísima generación, sino más bien a empleados de la Fuerza Aérea Estadounidense que se desplazan a sus lugares de trabajo.
Los proyectos militares que se pueden estar desarrollando en ellos, son ya harina de otro costal…