Turama, agencia de viajes en Coruña
«Seguro que nos estaban vigilando», «alguien nos tuvo que ver cuando salíamos de casa con las maletas«. Estas son algunas de las frases que más se escuchan en las salas de espera de las comisarías de policía, en el momento en el que se acude a denunciar un robo en la vivienda, mientras sus propietarios se habían ausentado por vacaciones.
Aunque la casuística es muy amplia y variada, no parece demasiado lógico pensar que las bandas de cacos tengan controladas a familias al azar, simplemente para saber cuándo abandonan sus domicilios.
Desgraciadamente, en muchos casos somos nosotros mismos los que, de manera no intencionada, nos encargamos de anunciar públicamente que dejamos nuestras casas vacías, aumentando con ello el riesgo de que esta información llegue a quienes no debería de llegar.
En los tiempos que nos ha tocado vivir, se hace realmente imprescindible tomar medidas preventivas con el fin de proteger nuestros intereses, si sabemos que vamos a estar fuera de nuestros hogares durante determinadas fechas.
Redes sociales
Actualmente, basta con acudir a las redes sociales para conocer datos privados y personales de muchos usuarios, que posteriormente pueden ser utilizados en su contra.
Pensando que se trata de información que no reviste mayor importancia, algunos internautas disfrutan no sólo subiendo las fotos correspondientes a su merecido descanso estival, sino que además anuncian todos sus viajes con excesiva antelación.
Esta clase de datos, publicados sin ningún tipo de filtro en webs que utilizan cada día muchos millones de personas, pueden convertirse en la mejor invitación para los amantes de lo ajeno.
Compartir los planes de viaje en abierto a través de las redes sociales, es la peor idea que podemos tener si queremos encontrarnos con desagradables sorpresas a nuestro regreso a casa.
Aunque ya hemos hablado de ello en otros posts, es igualmente una pésima idea publicar fotografías en las que se puedan ver tus tarjetas de embarque.
Estos documentos tan simples a primera vista, contienen datos sensibles no sólo referentes a tu persona y domicilio, sino también de tipo económico.
Te lo recordamos en este post: Nunca enseñes tu tarjeta de embarque a través de las redes sociales.
Ojo con las maletas
Probablemente no hayas caído en ello, pero es bastante probable que seas una de esas personas que cuando está en el aeropuerto, comparte demasiada información con cualquiera que pueda acercarse a su lado.
Si te preguntas cómo, la respuesta es muy sencilla: a través de las etiquetas que colocas en tus propias maletas, para el caso de extravío por parte de la compañía aérea.
A día de hoy, todavía hay muchísima gente que cree que en el caso de perder su equipaje, las gestiones para recuperar el mismo son mucho más sencillas si le añade etiquetas con todos sus datos personales y de contacto.
La realidad es que simplemente con el nombre del propietario, y como mucho una dirección de mail o un teléfono de contacto, es más que suficiente.
Incluir en las etiquetas la dirección de la vivienda, o cualquier otro tipo de dato de carácter personal, equivale a compartir toda esa información no sólo con las personas que se van a encargar de manipular tus maletas en los aeropuertos de origen y destino, sino también con cualquier espabilado que se acerque mínimamente a ti con un teléfono móvil en la mano.
A partir de ese momento, podrán llegar a conocer tu nombre y apellidos, lugar de residencia, domicilio, y todo lo que tú escribas a mayores en la etiqueta.
Ya no tienes porqué dejar luces encendidas en casa, ni una ventana abierta para no dar la apariencia de abandono, porque te han visto con toda la familia facturando tus maletas en el propio aeropuerto.
Lo que de verdad puede agilizar bastante la recuperación de una maleta extraviada, es que la diferencies de las demás.
Un adorno distinto, una cinta de colores, o una pegatina original, por ejemplo, llaman bastante más la atención que todos tus datos personales en un trozo de cartón.
A veces, las respuestas a las preguntas que planteábamos al comienzo de este post, son mucho más sencillas de lo que puedes creer, ya que de manera inconsciente somos nosotros mismos los que vamos anunciando al mundo nuestros propios datos, a la vez que confirmamos que nos vamos a ausentar temporalmente del domicilio habitual.