El proceso de adquisición podría finalizar el próximo año.
Probablemente hayas podido leer y escuchar múltiples opiniones, a favor y en contra de la operación de compra de Air Europa por parte de Iberia.
Mientras algunos mantienen que supondrá (dando por hecho que finalmente se culminase con éxito) un importante avance tanto para la compañía aérea bandera de España, como para el aeropuerto de Madrid, otros muchos afirman que un posible escenario de monopolio por parte de Iberia sólo contribuirá a la subida de las tarifas.
A este respecto tenemos que decir que la situación original que existía cuando se planteó esta operación, es completamente distinta a la actual, por lo que conviene tener en cuenta varios factores antes de poder pronunciarse.
El sector aéreo pre-pandemia no tiene nada que ver con el sector aéreo post-pandemia, y los enormes cambios que ha sufrido durante estos dos últimos años deben de ser analizados previamente a la emisión de juicios de valor.
Conectividad de Barajas
En primer lugar, habría que definir o especificar cuáles son los elementos que podrían afectar, de manera positiva o negativa, a los pasajeros de ambas aerolíneas.
Como es obvio, uno de ellos tiene que ser las tarifas que se abonan para poder volar una ruta en concreto.
El nivel de conectividad final del aeropuerto, entendido como el número de destinos a los que se puede volar desde el mismo en rutas directas, debería ser otro de los factores fundamentales.
Precios, horarios, disponibilidad, accesibilidad, variedad de rutas, frecuencias y número de asientos ofertados son, en definitiva, los parámetros que miden los pasajeros a la hora de escoger vuelos desde un aeropuerto u otro.
A día de hoy, la situación tanto de Iberia como del aeropuerto de Madrid, no es precisamente la mejor.
De acuerdo con la información facilitada por la consultora aérea OAG, en términos de conectividad Madrid Barajas ocupa el puesto 32 del ranking mundial, cuando en 2019 se situaba en el 28.
Dentro de Europa, Barajas es el sexto aeropuerto con mejor conectividad.
Por su parte, Iberia acapara alrededor de un 48% del tráfico en su hub de Madrid, el porcentaje más bajo en comparación con el que tienen sus principales competidoras europeas en sus respectivos hubs.
En lo que se refiere exclusivamente a los aeropuertos mejor conectados del Viejo Continente, destacamos al londinense de Heathrow, en el cual British Airways domina con el 51% de las operaciones, el aeropuerto internacional de Estambul, donde Turkish Airlines apabulla a su competencia con un clamoroso 79% del tráfico total, el parisino Charles de Gaulle, dominado con el 50% de Air France, el aeropuerto alemán de Frankfurt, donde Lufthansa maneja con soltura el 63% de las operaciones, y el holandés de Schiphol, donde KLM disfruta de un mayoritario 52% del mercado.
Estas cifras demuestran que el mayor grado de conectividad de un aeropuerto, no está reñido con el hecho de que la aerolínea principal del mismo maneje un alto porcentaje de sus operaciones.
De hecho, si nos vamos hasta el segundo aeropuerto mejor conectado de todo el mundo, Dallas Fort Worth, en los EEUU, vemos que en el mismo American Airlines capitaliza nada más ni nada menos que el 85% del total de operaciones, mientras que en el aeropuerto internacional Hartsfield Jackson de Atlanta, también en los EEUU, el tercero mejor conectado a nivel mundial, Delta Airlines copa el 77% de sus operaciones.
En el hipotético caso de fructificar la compra de Air Europa por parte de Iberia, esta última aerolínea podría aumentar su porcentaje de operaciones en Barajas hasta alrededor de un 65% del total, cifra muy similar a la que tienen el resto de sus competidoras en sus respectivos hubs, todos ellos con un mayor grado de conectividad que el aeropuerto madrileño.
Por lo tanto, al menos en un principio, el hecho de que Iberia incremente notablemente su porcentaje de dominio de mercado desde Barajas, no sólo no tendría porqué afectar al nivel de conectividad del aeropuerto, sino que incluso podría mejorarlo de manera muy significativa.
Subida de tarifas
Esto nos lleva directamente al segundo punto más crítico de esta operación, y quizás el que más preocupa a todos los usuarios del transporte aéreo: un posible incremento de las tarifas para las rutas operadas por Iberia, una vez finalice el proceso de compra de Air Europa.
Tal y como analizamos en anteriores posts, existen diversas rutas donde se solapan Iberia y Air Europa, que pasarían a ser explotadas únicamente por la primera.
Es más, el grupo IAG podría hacerse con aproximadamente el 70% de todo el mercado doméstico de España, a través de sus marcas Iberia, Vueling, las subsidiarias Iberia Express y Air Nostrum, más Air Europa (llegado el caso).
Un panorama que invita al dominio casi en exclusiva de IAG, podría derivar fácilmente en un manejo a discreción de las tarifas aéreas, algo que por otra parte también es discutible.
Aunque a Iberia le interesa sacar de la mesa a un competidor directo, como es Air Europa, el tablero en el que se juega esta partida no está precisamente pensado para los vuelos domésticos, sino más bien para las rutas internacionales, y más concretamente para aquellas cuyo destino está en Latinoamérica y los EEUU.
Con un tren de alta velocidad en pleno desarrollo dentro de la Península Ibérica, al que incluso ya le ha salido otro competidor en formato lowcost, una subida repentina de tarifas se convertiría en el mejor efecto llamada para las principales aerolíneas de bajo coste, deseosas de captar a los pasajeros que no están dispuestos a volar a cualquier precio.
No sólo esto, Iberia también se arriesgaría a perder la captación de pasajeros potenciales para sus rutas de largo alcance, que optarían por desplazarse hasta Oporto, París, Londres, Amsterdam, o Frankfurt, en busca de mejores precios (algo que, por cierto, ya está ocurriendo).
El interés de Iberia por Air Europa no es tanto por la competencia que supone entre ambas a nivel nacional (que también), sino más bien por lograr la hegemonía en las rutas que cruzan el Océano Atlántico.
El crecimiento de Air Europa en este segmento, dentro de SkyTeam, ha servido para alimentar el interés de otros grupos extranjeros por hacerse con la aerolínea española, algo ya demostrado desde Air France/KLM.
A nivel mundial, las aerolíneas Air France, KLM y Air Europa, englobadas en SkyTeam, manejan el 28,95% de todos los asientos ofertados en rutas hacia Latinoamérica desde Europa, mientras que el grupo IAG, en el que se engloba Iberia, se queda con un escaso 18,8%.
Esta situación se podría revertir en el caso de que IAG logre llevarse a Air Europa de SkyTeam, y la balanza cambiaría a favor de los hispano ingleses, que pasarían a manejar el 27,22% de este mercado, frente al 19,81% de los franco holandeses.
Es necesario recordar el enorme batacazo que se llevó Iberia en 2016, cuando la Corte Superior de Justicia de Chile revirtió el acuerdo que había alcanzado con LATAM, para la explotación conjunta de rutas entre España y destinos en Latinoamérica.
Una alianza que posteriormente sería explotada por la estadounidense Delta Air Lines, en detrimento de Iberia.
Por otro lado, la flota combinada de la que dispondría Iberia con Air Europa, sería otro factor añadido a favor de sus pasajeros.
Iberia ha apostado decididamente por el Airbus A350, mientras que Air Europa ha hecho lo propio con el Boeing 787, las aeronaves más modernas, sofisticadas y eficientes del segmento de largo radio.
A todo esto hay que sumar la desaparición definitiva del esfuerzo añadido que le supone a Iberia tener que competir con Air Europa, una fuente de recursos que podría ser utilizada de otra manera bastante más atractiva para los usuarios, como la exploración de nuevos destinos en Asia y Africa, o incluso a una bajada de tarifas, posibilidad que no podemos descartar.
Futuro de la marca Air Europa
Lo que si nos genera más dudas es el futuro de la marca Air Europa dentro del grupo IAG.
Tal y como apuntó en su momento el propio Willie Walsh, anterior CEO de IAG, el grupo está operando con demasiadas marcas: Vueling y Level en el segmento Lowcost, Aer Lingus, Air Nostrum, e Iberia Express en el Value, y British Airways e Iberia en el Full Service.
Lo más lógico sería pensar que Air Europa entraría en el segmento Full Service, con Iberia y Britsh Airways, lo que aumenta todavía más el número de compañías, sobre todo si atendemos a las operaciones domésticas.
Un cónclave de nombres demasiado extenso, que tendría que acabar reduciéndose de alguna manera, a imagen y semejanza de lo que lleva haciendo desde hace tiempo Lufthansa en Alemania.